25.1.11

Iansañ


LLegó Iansañ a revolverlo todo. Entró por la ventana. Me había sentido incomodada por el viento desde que me instalé en ese departamento, me llamaba la atención el ímpetu y lo intempestuoso de sus apariciones, llevándose postales, cartas y puertas por delante.
Me tendí en la cama y apareció ella. Voló papeles y fotos, cerró las persianas, estampó la puerta. Oscureció el ambiente, espesó el aire. Me recordó un pedido de hace algunos meses, y recién ahí entendí su presencia. Había estado todo el tiempo conmigo, yo la había llamado.
Una alabanza, un baile... se que cuando el viento cese los cambios habrán terminado.

24.1.11

Partículas






Había pedacitos de mí por todo el cuarto. Era mi manera de poseerlo. Mi manera de invadir su territorio, de violar sus mujeres y prender fuego a todos los recién nacidos en sus lechos. Era la única manera de entrar en él.