13.7.25

Raices de cemento

 Tenía alas en los pies 

solían ser suaves, 

cuando danzaban.

Han encallecido ahora

al igual que mis manos

y mis entrañas.

En invierno 

el aliento frío

del viento 

amontonaba nubes

de palabras;

mi horizonte

no se congelaba,

mis sentidos

no se apagaban.

Los mares ardían

las aguas se abrían

a mi paso.

Alguna vez decrete: 

"que pueda vivir 

siempre en la belleza";

bajo la tierra espero

broten mis pasos

de savia nueva.


24.2.25

Viajar

Puedo danzar el cansancio,
la vulnerabilidad,
la tibieza.
Pues todos los lugares
donde alguna vez viví
son míos para siempre.
Puedo exhalar el alma
por los pies
y dejar que viaje,
libre, a donde quiera.
Asi mientras mi cuerpo
hace su danza
ella es viento
o es pradera.

15.2.25

Ritual de creatividad

Para un buen ritual de entrada a la dimensión creativa, no deberían faltar ni el mate ni el silencio.

Tampoco un momento de reflexion frente a la inmensidad de, por ejemplo, una ventana que de a la infinitud del mar, la aparente calma de un lago o al imponente misterio de los cerros. 

La creatividad despierta en un corazón vivo y una mente bien alimentada. 

No está demás guardar el miedo a la mediocridad en un frasco bien sellado, para que no se escuche el veneno de su susurro entre las herramientas de trabajo; y silenciar las voces de quienes jamás salieron de entre los barrotes rancios y oxidados del encierro en el deber ser.

También, por supuesto, cómo elemento indispensable, será necesario un gato.

13.2.25

Instrucciones para morir


Deslizarse suavemente desde los extremos hacia el centro.

Reptar con las manos y los isquiones, según toque estar acostada o sentada, explorando las texturas del espacio.

Derretir las articulaciones hacia la tierra y dejar que ésta absorba el cansancio.

Desaparecer lentamente mientras se van las últimas luces del día.

Hacer silencio.


Ejercicios con @escritura.enmovimiento ❣️

31.1.25

Ventanales y o\tras\luces

 

Cuando escaparme del mundo

era irme con vos

las sabanas 

nos quedaban chicas


Ahora, si me deslizo bajo fondo

y repto hacia el final 

el universo se cierra 

detrás mío


Un cielo de mantas pesa oscuro

luces fatuas se encienden

y manchas de sal

juegan al trasluz 

de mis sentidos 


El Nunca Jamas me espera

para detener el tiempo 

volver a ser crisálida

y contener mis años

en su ombligo.